San Fernando | CÁDIZ
Dos plantas, unos 1.200 metros cuadrados, para zambullirse por completo en el universo de Camarón a través de una experiencia predominantemente audiovisual y un discurso emocional que conmoverá a los visitantes. Así será el museo que se levantará junto a la emblemática Venta de Vargas.
No se trata de un museo al uso. El discurso expositivo se aleja bastante de lo convencional. Camarón es la bisagra entre la tradición y la vanguardia y ese es el espíritu que debe prevalecer en el mensaje expositivo del centro. Ese recorrido por la vida y obra del artista isleño incidirá así en el proceso artístico que se produce, en esa transformación interior que experimenta desde que Camarón es José hasta que José se convierte en Camarón, un viaje hacia la modernidad y el cambio que removió los cimientos del flamenco.
Un espacio en el que predominarán los recursos audiovisuales e interactivos que se valdrá de las nuevas tecnologías para arrastrar al visitante a una experiencia puramente emocional.
El Museo tendrá además una estructura sumamente sencilla. El contenido se articulará en tres grandes áreas o bloques temáticos que recorrerán cronológicamente la vida de Camarón: origen, leyenda y revolución.
Tanto en una sección como en otra el peso de la narración expositiva en torno a la figura de Camarón será audiovisual. Las proyecciones en pantallas a gran escala y la iluminación tendrán así un protagonismo especial. Actuarán de manera independiente para llevar al visitante en este viaje emocional por la vida de Camarón pero también -cada cierto tiempo- de manera conjunta para convertir la visita al Museo Camarón en toda una experiencia.